Con esta campaña, Ecologistas en Acción pretende trasmitir a la ciudadanía y a los partidos políticos los efectos negativos que esta avalancha de centros comerciales está teniendo sobre la economía, el empleo, el tejido comercial y la sostenibilidad en nuestro entorno.

El acto celebrado en el Centro Vecinal Pumarejo «Felisa García», Ecologistas en Acción presentó los impactos globales que la avalancha de grandes superficies comerciales está provocando. Poniendo el foco en el caso de Palmas Altas. Se resaltaron los impactos que este centro comercial tendrá en el tráfico y la movilidad en la zona, con el consiguiente aumento de la contaminación. También se señalaron las irregularidades urbanísticas que se han cometido para poner en marcha este proyecto, y las medidas que Ecologistas en Acción está llevando a cabo par denunciarlas. Finalmente, representantes de las asociaciones vecinales «Parque Vivo del Guadaíra» y «Asociación de Vecinos Bermejales Activa» expusieron el punto de vista del vecindario directamente afectados por la implantación de esta gran superficie comercial.

En Sevilla y sus cercanías se vive una auténtica burbuja inmobiliaria con la promoción de varias iniciativas de grandes centros comerciales. Algunos de ellos ya están en funcionamiento (como el centro comercial de Torre Sevilla), otros están en fase avanzada de construcción (el caso de Palmas Altas), otros comienzan ahora sus trámites (Sevilla Park), y otros se han visto frenados al menos temporalmente por las iniciativas que desde la sociedad civil sevillana se han llevado a cabo (el caso de San Nicolás Oeste, o Waterland en Espartinas). Estos proyectos se sobreponen al gran número de centros comerciales de uno u otro formato existentes en la ciudad.

Esta avalancha de grandes superficies comerciales está afectando seriamente al comercio tradicional, que no puede competir con las facilidades dadas por el ayuntamiento para la implantación de los grandes centros comerciales. Esto está afectando negativamente a la vida social en los barrios.

Contra lo que se dice habitualmente, Ecologistas en Acción considera que estas grandes centros comerciales producen una destrucción neta de empleo. Aunque indudablemente crean puestos de trabajo, al destruir el tejido comercial de proximidad en los barrios, destruyen más puestos de trabajo que los que crean.

Finalmente, estas grandes superficies comerciales se están implantando en la periferia de la ciudad, impulsando un modelo en el que para comprar hay que desplazarse desde los barrios. Esto está provocando un aumento de la movilidad motorizada, como se ha denunciando de forma reiterada en el caso de Palmas Altas.

Ecologistas en Acción considera que esta avalancha tendrá una gran incidencia negativa en la ciudad y su entorno, y que es un tema que debe ser encarado por el consistorio que salga de las elecciones.