Movilidad

09/07/2015
Ecologistas en Acción Ciudad de Sevilla



Ecologistas en Acción pide participar en la mesa sobre movilidad anunciada por el Alcalde

Ecologistas en Acción rechaza la construcción de la red de metro subterráneo, muestra su oposición a la construcción de aparcamientos rotatorios en la periferia del casco antiguo y lamenta la venta de la línea 1 de metro a un fondo de inversión, lo que supone la casi completa privatización de una infraestructura que ha costado a la ciudadanía 700 millones de euros y cuyos beneficios no repercutirán en una mejora del servicio a los usuarios. El colectivo exige el conocimiento de las condiciones de dicha venta para saber quien asumirá el coste de mantenimiento de la línea 1 de metro, entre otros asuntos.

Por otro lado, tras las declaraciones de Espadas sobre la constitución de una mesa de movilidad y las propuestas planteadas Ecologistas en Acción reclama participar en dicha mesa y exponer nuestros puntos de vista:

La construcción de aparcamientos rotatorios provoca un efecto llamada al vehículo privado que sólo ayuda a generar más atascos, además de aumentar los casos de estacionamientos en doble fila y otras ilegalidades, pues los conductores prefieren no pagar por aparcar. Otra cuestión es el elevado coste de construir aparcamientos subterráneos en estos momentos de crisis y de altos niveles de endeudamiento; creemos que hay urgencias sociales mayores al lujo de poder desplazarse en coche privado y poder aparcar. Por todo ello, apostamos por modificar el PGOU para excluir definitivamente la posibilidad de construir aparcamientos rotatorios en la periferia del casco antiguo.

Por el mismo motivo consideramos inviable en términos financieros, ecológicos y sociales la construcción de las tres líneas de metro subterráneas ya que tendrían un coste de unos 7.000 millones de euros (incluyendo posibles sobrecostes a tenor de lo ocurrido con la L1) que se dispararían a 14.000 millones ya que la financiación debe ser público-privada como marcan las directrices europeas sobre deuda. Esto equivale  al presupuesto anual durante 40 años del ayuntamiento de Sevilla, lo que supondría aumentar los niveles de endeudamiento público que ya superan el 100% del PIB español.

Coincidimos en la intención expresada por el alcalde de apostar por el transporte público, lo cual pasa irremediablemente por la construcción de una red de carriles bus con plataforma reservada como indica el PGOU. Para que esta sea red sea eficiente hace falta incorporar sistemas de prioridad semafórica y de acceso por las tres puertas del bus. La velocidad media de TUSSAM es de 12,9 km/h frente a los 30 km/h del metro. Las medidas que proponemos equipararían ambas velocidades comerciales, pues los autobuses pierden mucho tiempo en atascos, bajada y subida de pasajeros uno a uno y en los semáforos. Consideramos igualmente necesario restringir la entrada de vehículos privados al casco antiguo como ocurría durante el período de vigencia del Plan Centro. La circulación sin control de vehículos  privados al centro colapsa los accesos,  atrapando a los autobuses en los atascos, genera ruido y contaminación atmosférica.

Otra alternativa compatible con la red de carriles bus es la prolongación de la línea de tranvía actualmente en servicio hacia puntos neurálgicos de la ciudad. Así como apostar por la intermodalidad bicicleta y transporte público, construyendo aparcamientos de bicis seguros y cómodos junto a los principales nodos de transporte público.

Por último es conveniente recordar que el transporte es uno de los principales causantes del cambio climático. Desde las ciudades pueden llevarse a cabo iniciativas que palien este grave problema mediante la construcción de sistemas eficientes, ecológicos y económicos de movilidad para lo cual es indispensable ganar terreno al coche,  que consume el 60% del espacio público de las ciudades,  creando empleo y mejorando la calidad de vida de la ciudadanía. Sevilla tiene espejos interesantes en los que mirarse: Berlín, Helsinki, Amsterdam, Copenhague... ciudades que cuentan con amplias zonas peatonales y zonas verdes, redes de transporte público  intermodal y accesible para personas con diversidad funcional y un comercio local vivo y atractivo, pues sus usuarios no sufren monumentales atascos ni atmósferas contaminadas a la hora de desplazarse.